Luego del empate de River en Tucumán, que le costó el torneo al “Millo”, Marcelo Gallardo enfrentó los micrófonos y además de felicitar a Boca por la obtención del título, cargó contra Patricio Loustau y sus asistentes Juan Pablo Bellati y Gabriel Chade. El que recogió el guante y respondió fue el colegiado. “Es muy difícil de resolver sin VAR. En otra situación me hubiesen dicho ‘Patricio no reanudes’. Eso hubiera pasado si se hubiese analizado con VAR”, remarcó Loustau sobre la primera polémica de la noche en Tucumán: un offside fino que su asistente Chade no dudó en cobrar en una jugada que terminaba con gol de Rafael Borré cuando el partido estaba 0-0. “La posición de la cámara, de manera oblicua, es algo que trabajamos en el VAR. Da la sensación de que con la tecnología se hubiese definido claramente algo que acá no se puede. En situaciones tan grises yo soy de los que cree que hay que darle la derecha al línea”, agregó.

El ex árbitro Javier Castrilli una vez finalizado el partido se expresó en las redes sociales: “Boca: Felicitaciones. River: el presente del arbitraje argentino te jugó una mala pasada: un gol anulado por posición adelantada inexistente y dos penales a favor no sancionados. Al arbitraje se le debe prestar atención siempre”, posteó en Twitter.

Por su parte Loustau se mostró seguro de las decisiones que tomó en el partido. “Hoy quiero reconfirmar las decisiones que tomé. La caída de Matías Suárez dentro del área es producto del impacto abajo que lo hace trastabillar, no del estiramiento de la camiseta”, indicó sobre la jugada del segundo tiempo que tuvo como protagonista a Suárez y a Guillermo Ortiz.

Sobre la polémica de los primeros minutos del segundo período indicó: “Bajo mi punto de vista (Ignacio) Fernández impacta primero el balón y como el control es largo aprovecha ese contacto para dejarse caer”, puntualizó.

Los protagonistas se expresaron. Pero en los debates de café se recordarán y se discutirán estas situaciones por un largo tiempo.